Aceites Esenciales:
-Beneficios de los aceites esenciales:
Además de hidratar y nutrir en superficie, quizá lo más importante de estas esencias vivas son sus virtudes relajantes, tonificantes o descongestivas, captadas al instante por el olfato y que constituyen toda una ciencia curativa.
-Contrarrestar el insomnio
-Reducir el stress
-Disminuir la ansiedad
-Aliviar el dolor
-Quitar la depresión
-Aumentar las defensas inmunológicas
-Corregir problemas estomacales crónicos
-Se pueden utilizar para higienizar una habitación, ropa o artículos personales de la persona enferma
-Evitar contagios
-Despejar las vías respiratorias
-Aumentar las defensas del organismo:
-Fluidificar las secreciones
-Mejorar el sistema inmune
-Calmar la tos
-Dolor de garganta
-Es importantísimo recalcar que los aceites no deben ingerirse nunca, ni aplicarse tampoco directamente sobre la piel. Por eso, se usan siempre diluidos en agua, mezclados con los llamados "aceites base" (aceites neutros) o por difusión en el aire.
Masaje: Uno de los métodos de aromaterapia más eficaces, pues a la eficacia de los aceites esenciales se une el poder terapéutico del masaje. En un aceite base (de almendras dulces o de albaricoque, por ejemplo) se diluye de un 2,5 % a un 5% de aceite esencial, dependiendo del extracto elegido.
Baño: Podemos echar varias gotas de aceites esenciales sobre el agua tibia de una bañera y luego sumergirnos durante 15 o 20 minutos. Por este medio estamos tanto aspirando el vapor de los aceites esenciales como permitiendo que estos penetren a través de nuestra piel. Si lo prefiere puede mezclar de 3 a 5 gotas de aceite esencial con tres cucharadas de miel de abeja antes de echarlo en el agua.
Inhalación: Podemos echar algunas gotas en un pañuelo y oler o podemos echar de 6 a 12 gotas en una olla de agua hirviente, luego colocamos una toalla o manta que cubra tanto nuestra cabeza como la olla e inhalamos el vapor durante varios minutos. Se debe tener la precaución de no acercarse demasiado ya que podemos quemarnos la cara con el vapor.
Difusión: Existe en el mercado una amplia variedad de productos para llenar el espacio de una habitación u oficina con el aroma de los aceites esenciales. Estos productos, llamados difusores o atomizadores, esparcen los aceites esenciales formando una nube de diminutas partículas. Estos difusores pueden ser de utilidad en casos de afecciones respiratorias o simplemente para llenar el aire con una fragancia ya sea calmante o estimulante.
Compresas: Estas pueden ser frías o calientes. Se utilizan para aliviar dolores de cabeza, y molestias musculares. Se pueden añadir de 5 a 10 gotas de aceites esenciales a 4 onzas de agua. Se empapa una toalla en esta solución y se aplica al área dolorida.
Principales Aceites Esenciales
Algas: Favorecen al aumento de concentración y generan interés sobre las actividades de tipo intelectual (leer, redactar, etc.)
Anís: Ayuda a descansar la vista; calma los calambres, gases, dolores abdominales, dolores menstruales, náuseas y dolores de garganta. Así mismo, por su efecto diurético evita la retención de líquidos.
Albahaca: se utiliza para el dolor de cabeza y migrañas, también para la fatiga mental. Angélica: ayuda a contactarse con lo Divino.
Bergamota: eleva el espíritu, refresca y relaja. Es muy útil para casos de depresión, ansiedad y tensión.
Camolina: Tensión premenstrual, indigestión, moderadamente antialérgico, rinitis o polinosis (fiebre del heno), acné, eczema y otras alteraciones cutáneas
.
Canela: es afrodisíaco y estimulante mental.
Cedro: efecto sedante indicado para el estrés. Cedrón: sedante se combina con lavanda. Ciprés: se usa en duelos como en otras etapas de cambio.
Clavo de olor: agotamiento mental para dejar de fumar.
Enebro: actúa sobre los planos mentales, emocionales y físico, alivia situaciones de confusión y cansancio.
Eucalipto: actúa en el aparato respiratorio es descongestivo.
Geranio: antidepresivo, relajante y para restaurar y estabilizar emociones.
Jazmin: Depresión, especialmente la posparto, favorece la contracción durante el parto, afrodisíaco.
Jengibre: dolores reumáticos y musculares, agotamiento sexual y físico.
Lavanda: es un sedante muy efectivo, se utiliza en problemas de insomnio. Ayuda a balancear estados emocionales como histerias depresiones, calma, relaja.
Lemongrass: se usa en la fatiga mental es un estimulante mental.
Limón: estimulante mental, antiséptico, astringente, cicatrizante.
Mandarina: calmante y sedante, brinda alegría. Mejorana: actúa mejorando estados de soledad, ansiedad.
Manzanilla romana: Se utiliza contra los dolores estomacales, dolores musculares, dolores a las articulaciones, fiebre y para disminuir la irritación y/o proteger las pieles sensibles.
Menta: estimula el cerebro ayuda a despejar los pensamientos.
Mejorana: Dolores menstruales, cefaleas, afecciones faríngeas, moderadamente sedante, inductor del sueño, calorífero, mejora la circulación, algunas infecciones fúngicas (como las aftas), acné.
Naranja: es antidepresivo y restaura elevando el espíritu.
Pino: estimulante del sistema nervioso, brinda energía y bienestar.
Neroli: Insomnio, ansiedad, depresión, moderadamente calorífero, mejora la circulación sanguínea, acné, moderadamente analgésico, tensión o dolor premenstrual, dolor de espalda.
Patchouli o Pachuli: Anti-depresivo que también se usa para contrarrestar los problemas de hongos, la caspa y los signos del enevejecimiento.
Romero: estimula la memoria, la claridad mental, procesos creativos es un protector psíquico y un estimulante físico.
Rosa: Sinusitis y afecciones faríngeas, congestión, edema palpebral, hinchazón facial, algunos problemas circulatorios (incluida fragilidad capilar), moderadamente sedante, inductor del sueño, tensión o dolor premenstrual, antidepresivo, síntomas menopausicos, disminución de la libido, anorexia nerviosa.
Salvia: relajante, armoniza la sexualidad por relajante y distiende la energía sexual. Sándalo: propiedades sensuales, meditación, aquieta los pensamientos, es ansiolítico y antidepresivo.
Sandalo: Piel seca o cuarteada, acné, induce la relajación durante la meditación, afrodisíaco.
Tomillo: antiséptico de vias respiratorias y antitusivo. Es tónico y energizante en el nivel físico, mental y emocional, mejora la memoria. Vetiver: es un relajante profundo, balancea energía de grupo puede ser afrodisíaco.
Ylang-Ylang: antidepresivo y sedante, actúa sobre dificultades sexuales, por stress y ansiedad, es utilizado en estados de tensión nerviosa, insomnio e hiperactividad.
Precauciones
Obviamente, los aceites esenciales están muy concentrados; si se aplican directamente, pueden irritar la piel. Antes de usar un aceite esencial por primera vez, especialmente si existen antecedentes de reacciones alérgicas, se debe realizar una prueba cutánea en presencia de un clínico ecologista u otro terapeuta cualificado.
En ningún caso deben ingerirse los aceites esenciales, excepto cuando lo indique un terapeuta experto en el uso médico interno de los aceites. En algunos países, los aceites esenciales preparados para ser ingeridos solamente se despachan con receta médica. Deben evitarse en los embarazos que presenten complicaciones. Tampoco debe utilizarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario